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Siempre me llamaron la atención las plantas. Crecen cómo y desde donde sea, es suficiente una mínima grieta en medio del asfalto negro, seco, caliente y árido para que empiece a crecer una. Pueden quemarlas, secarlas, ahogarlas, cortarlas o sofocarlas y ellas seguirán creciendo, tal vez, incluso, en contra de su voluntad. Aunque les duela tener que rebrotar cada una de las veces, no pueden dejar de hacerlo, porque su naturaleza es sobrevivir, sobrevivir y rebrotar, rebrotar y florecer. Siempre. Esta es la historia de cómo yo me convertí en planta.

Produktbeschreibung
Siempre me llamaron la atención las plantas. Crecen cómo y desde donde sea, es suficiente una mínima grieta en medio del asfalto negro, seco, caliente y árido para que empiece a crecer una. Pueden quemarlas, secarlas, ahogarlas, cortarlas o sofocarlas y ellas seguirán creciendo, tal vez, incluso, en contra de su voluntad. Aunque les duela tener que rebrotar cada una de las veces, no pueden dejar de hacerlo, porque su naturaleza es sobrevivir, sobrevivir y rebrotar, rebrotar y florecer. Siempre. Esta es la historia de cómo yo me convertí en planta.
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Autorenporträt
Nadia Burkett Simonutti nació el 30 de abril de 1990 en un hogar pobre de la ciudad de Santa Fe, Argentina. Con un padre alcohólico y violento, durante su infancia recibió una educación fuera de lo convencional. Toda su vida luchó contra las estadísticas para lograr sobrevivir en un mundo ajeno, en donde las oportunidades de triunfar parecen estar destinadas a la clase alta. En 2015 creía tener su vida encaminada, con una destacable carrera profesional que le permitió auto solventar sus estudios de Ceremonial y Protocolo, Organización de Eventos y Relaciones Públicas. Nunca pensó en la escritura como parte de su vida. En medio de una interminable lucha contra el pasado y hundida en el peor de los laberintos, descubrió que escribiendo lograba invocar su resiliencia, ese brote de vitalidad que se negaba a desaparecer. La escritura le salvó la vida. Escribiendo liberó su alma.