La época actual, se caracteriza por un creciente desarrollo científico-técnico. En ella, la cultura alcanzada por el hombre abre las puertas hacia la consecución de elevados niveles de competitividad deportiva. Estas posibilidades se conjugan, con altas exigencias en las competencias deportivas a nivel internacional, donde se manifiestan intereses mercantilistas. En esta dirección, hoy se produce una serie de cambios conceptuales, estructurales y operativos en los modelos competitivos, los cuales dependen de las grandes variaciones en los sistemas de preparación del deportista; así como en la dirección científica del profesor de deporte y la correspondiente base tecnológica del proceso de entrenamiento. Como rasgo distintivo de estos cambios, se encuentra el inexorable aumento de las cargas físicas al deportista.