La frecuente publicación (...) sobre intercambios o interacción social en comunidades prehistóricas, más allá de ser una simple moda o justificación científica del "libre" mercado europeo, como algún autor supone (Morris, 1988), indica la considerable importancia de este mecanismo socio-económico para explicar la dinámica particular de las sociedades humanas. Ninguna sociedad humana ha evolucionado de manera aislada. Es más, la aparición de cambios, ya repentinos, ya evolutivos es una consecuencia del grado de relación del grupo social con aquellos que le rodean. Debemos, por tanto, analizar las relaciones de intercambio, precisamente porque la forma en que una comunidad entra en contacto con otra afecta a la organización social y económica de ambos grupos humanos (Barceló, 1997: 2; tomado de Acero, 2015).