Hay una tendencia creciente en la intención de implementar la inclusión social, desde organismos supranacionales como la ONU, la OEA, la UE, etc. y todos los países que adhieren a la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Esta tendencia va dando sus frutos, en algunas áreas más que en otras. Con relación a los derechos de la salud se han logrado avances importantes como el reconocimiento de los tratamientos del HIV o la diabetes. En el ámbito de la salud mental, también hay iniciativas significativas desde ámbitos gubernamentales y ONG que promocionan la inclusión para la discapacidad mental. Pero al hablar de discapacidad mental generalmente se piensa en retraso mental y las acciones apuntan mayoritariamente a los niños. la esquizofrenia también es una importante causa de discapacidad mental pero está excluida de la mayor parte de los programas de rehabilitación e inclusión. La intención de esta actualización es, no solo mejorar la calidad de vida de los pacientes, su familia y su entorno sino también promover dispositivos, herramientas y habilidades de inclusión, para los pacientes, las familias y fundamentalmente el equipo terapéutico que es quien debe promoverlos.