La presente es una investigación basada en experiencias y respaldos científicos, ante la falta de asistencia técnica y capacitación en el medio rural, es así como nace la idea de poner una parcela de experimentación con 7 variedades de maíces, que fueron desarrollados en valles altos de México, y con ello buscar una alternativa más en los sistemas de producción de la región, y con ello aumentar la producción por unidad de superficie, debido a que actualmente los maíces nativos de la región son de origen criollos, lo que representa nulos ingresos hacia los productores por ser de auto-consumo y esto limita la producción en grandes volúmenes, que garanticen la comercialización la generación de empleos, y con ellos generar una agricultura sostenible mediante la recuperación de suelos, empleando una agricultura de conservación que consiste en la incorporación de residuos orgánicos, disminuir las labores culturales y la rotación de los cultivos con estas tres medidas podemos presumir una agricultura sostenible, amigable con el medio ambiente.