Querer hablar de la vida de Adolf Hitler es hablar de la II Guerra Mundial y el consiguiente Holocausto. La simbiosis entre los hechos bélicos entre 1939 y 1945 y Hitler es perfecta. Me es muy difícil el diferenciar la vida personal de Hitler de la II Gran Guerra porque su vida fue la Guerra y la Guerra fue Hitler. El "pequeño cabo" nació en el seno de una trágica familia que marcó su niñez y juventud con tintes de inferioridad psicológica; palizas y alcoholismo paternos, un desarraigo escolar y la imperiosa necesidad de querer ser importante para alguien, trazan en la mentalidad de Hitler un esquema de odio antisemita y la búsqueda de valores que le den sentido a su vacía vida. Si Hitler fue un Dictador creo que fue la casualidad o la oportunidad de encontrar alguien que en un momento dado le escuchó; se sintió importante y utilizó todos sus recursos personales para prosperar en la convulsa Europa de principios del Siglo XX. Lo cierto es que su odio potenciado con los años y transformado en inflamados discursos le llevó al poder en Alemania. Supo decir a los ciudadanos alemanes lo que querían oír; utilizó las palabras adecuadas junto a métodos de persuasión intimidantes para granjearse una fama de tirano, puesto en el que se sintió muy cómodo hasta su suicidio. De mente paranoide e ideas fantasiosas arrastró a Alemania hacia la perdición total ayudado por personajes tan infames como él usando la brutalidad de las armas como compensación a su carencia de humanidad.
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