¿QUÉ HACEN LOS NIÑOS CUANDO NO OBTIENEN LO QUE QUIEREN? Con este cuento los niños pueden verse reflejado en Anaís, sentirse frustrados y darle salida a su frustración a través de su propia creatividad e imaginación, una habilidad con la que nacen y que con tanto enfocarlos en la parte puramente mental, los niños van perdiendo. ¡QUÉ IMPORTANTE ES QUE A LOS NIÑOS SE LES RESPETE Y LES AYUDEMOS A DESARROLLAR SU PROPIO MUNDO INTERIOR! Anaís pudo jugar a muchas cosas, y también se sentía feliz cuando no estaba jugando, porque, gracias a su hada madrina y a aquella bola de luz blanca como la luna, descubrió su propia magia. Encontró un mundo en su interior que la tranquilizaba, que le daba paz... que le ayudaba a no estar enfadada.
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