Se puede decir que textos y cuestionarios como los antes citados forman un todo estructurado, donde los elementos se mantienen los unos con los otros sin por eso impedir su paso o su pertenencia a niveles distintos del sentido; el sentido de los cuales no se da sólo como el resultado de la progresión lineal y sintagmática de los elementos lingüísticos, sino que despliegan su riqueza, aplicable a diferentes niveles de la enseñanza, por medio de una lectura inversa, por la que se busca la confirmación (o refutación) de lo anteriormente intuido. Por su carácter particularmente literario este texto, permite un gran número de observaciones concretas y su verbalización correspondiente en lo que se refiere a lo objetos nombrados o expuestos, de en cuando permiten incluso una lección de cosas (nivel denotativo). Además, posibilitan bajo forma de suposiciones, donde se pueden poner en juego los objetos o personas respectivas que tienen un papel principal en el texto, o las diferentes combinaciones que surgen. En cuanto a esto, los estudiantes en interacción con el docente, podrán expresar sus pensamientos y asociaciones motivados por los comentarios y cuestionarios (nivel connotativo).