La criopreservación de semen produce daños celulares a nivel de membranas plasmáticas, mitocondria y ADN debido principalmente a la formación de cristales de hielo intra y extracelular; así como, al estrés osmótico y oxidativo generado. Para minimizar estos daños se utilizan medios diluyentes que simulan las características fisiológicas del semen y contienen sustancias crioprotectoras, las cuales con ayuda de algunos antioxidantes proporcionan una mayor supervivencia espermática posdescongelación y mejora en las tasas de motilidad y fertilidad. La adición de antioxidantes enzimáticos como superóxido dismutasa, catalasa y peróxidasa durante el proceso de criopreservación de células espermáticas en peces, no favorece las tasas de motilidad espermática posdescongelación ni de fertilización en las especies trucha arco iris y de arroyo, mientras que los no enzimáticos (MDPA, BHT, cisteína, propóleo, ácido ascórbico, lisina y carnitina) las mejoran de forma significativa en especies como esturión beluga, carpa común, esturión ruso y trucha arco iris.