La simulación clínica se ha venido destacando como una metodología didáctica y pedagógica que promueve el aprendizaje en el estudiante de ciencias de la salud. Del mismo modo, se establece la practica evaluativa como estrategia que proyecta transformar el conocimiento y fomentar el aprendizaje en simulación, contemplando las competencias en el saber ser, saber conocer y saber hacer, permitiendo al estudiante tener un acercamiento al ámbito en el cual se desempeñara, por medio de herramientas analíticas, criticas, procedimentales y éticas correspondientes a la disciplina de enfermería. El libro cuenta con tres capítulos que reúnen herramientas para la práctica docente, instrumentos evaluativos, competencias no técnicas como el liderazgo, y estrategias para poder empoderar sus destrezas en el aula simulada, además de permitir reflexionar acerca de la evaluación y su aporte para las instituciones.