Los tumores negros son un motivo frecuente de consulta dermatológica. La principal preocupación de todo dermatólogo es descartar un melanoma cutáneo. Proponemos un escenario de simulación híbrido para residentes de dermatología, cuyos objetivos son diagnosticar dermatoscópicamente un melanoma entre otras lesiones cutáneas pigmentadas y, a continuación, anunciar la sospecha diagnóstica al paciente simulado.En la sala de simulación se instaló un simulador híbrido compuesto por un torso de maniquí con lesiones cutáneas pigmentadas y un paciente simulado. Se necesitó un dermatoscopio digital y un ordenador. El grupo objetivo estaba formado por 4 residentes de dermatología. La situación clínica presentada fue la de un paciente que consulta para la modificación de una de las lesiones pigmentadas que tenía en la espalda. Tras recibir al paciente, el alumno examina las lesiones pigmentadas en el torso de un maniquí e interpreta en voz alta la imagen dermatoscópica correspondiente, que visualiza en la pantalla de un ordenador. Durante el debriefing, el formador comenta las distintas etapas del escenario, utilizando bucles de Contextualización-Descontextualización-Recontextualización.
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