El presente libro, contiene la elaboración de nuevas concepciones o su resignificación frente a los propósitos de aplicación en diferentes áreas, que exige una constante reflexión crítica y teorización permitiendo a la vez su retorno y efecto trasformador en el ser humano, en donde los psicólogos necesitan asumir el protagonismo que tienen en la definición de creación de modelos teóricos que respondan a las problemáticas que nos aquejan en la actualidad. Para consecución de este fin en el libro se desmitifica los conceptos instrumentalistas, de neutralidad, de la participación social y política en la psicología, entre otros. Es relevante señalar que otros enfoques sociales y psicológicos minimizan la subjetividad culturalmente organizada. En las prácticas profesionales la subjetividad ocupa un lugar importante en los compromisos que el sujeto asume y para su estudio, se conceptualiza como producción y no como reflejo. El enfoque histórico-cultural, orientado por una visión integrativa es sensible a las aportaciones provenientes de diversas aproximaciones teóricas y de esta manera potencializar el estudio de lo psicológico de manera coherente, abierta y flexible.