En un ensayo sobre Franz Kafka, el escritor cubano Virgilio Piñera, señaló que el mundo se dividía en dos grandes mitades si lo miramos desde el ángulo de la personalidad: el de los que tienen fe y el de "los que dan fe". Estos que dan fe reciben el nombre de artistas. Los artistas, aunque no sean hombres y mujeres de fe, sirven para dar fe de la marcha del mundo. Este libro nos presenta una galería de artistas, de artesanos de la palabra, que dieron fe de un mundo y su crisis. Una crisis que sigue tejiendo miedos en la condición humana.