Desde una perspectiva histórica, el libro examina la aparición de los grupos de cazadores recolectores, hace 10.000 años atrás, pasando por el establecimiento de las primeras sociedades sedentarias, el surgimiento de formaciones sociales como Tiwanaku y Pacajes, hasta la conquista Inka (1470 d.C.) en el Valle Alto de Tiwanaku. El estudio complementa la secuencia de ocupación y ofrece una revisión de los debates actuales de la evolución de uno de los centros de poder más importantes en los Andes Centro Sur, el Valle de Tiwanaku. Basándose en análisis espacial K-meas y de rango tamaño el autor examina el patrón de asentamiento humano en el Valle Alto y su relación con los cambios más importantes en las estrategias de control de los medios de producción y la praxis social a través del tiempo y el espacio, destacando la variabilidad del registro material y las esferas de interacción con los distintos grupos que habitaron el Valle de Tiwanaku.