El tipo de planificación del desarrollo que hemos utilizado a lo largo de los últimos años resulta cada vez más difícil e inútil por las razones siguientes: el concepto mismo de desarrollo ha sufrido profundas modificaciones; el entorno en que vivimos y planificamos es demasiado conflictivo e impredecible; los sentimientos y las pasiones pero no la racionalidad son el fundamento principal en la toma de decisiones; las relaciones causa-efecto y los conceptos básicos como derecha - izquierda, capitalismo - socialismo, o bien - mal se han desdibujado; y los metarrelatos más o menos generalizados que nos han guiado se han debilitado. Con el presente libro se pretende contribuir en alguna medida a empezar a superar esas limitaciones.