Los habitantes de la cuenca de Mamarramos, ubicada en Villa de Leiva, Boyacá, Andes Nororientales de Colombia, recolectan y consumen hongos para alimento. Los hongos, considerados un recurso silvestre, realmente son el resultado y reflejo de la transformación del paisaje de selva altoandina a tierra agrosilvopastoril, y el reconocimiento de especies comestibles es el resultado de procesos migratorios en la región.