Oh, estos sueños de niña y de adolescente! El mundo bello y despreocupado de los comerciales, que a una muchacha de un pueblito en la Sierra Madre, le parecen como una realidad, que de seguro existe. Y las telenovelas! Cuando una muchacha es de corazón puro y noble, se gana su príncipe azul! No lo dirían si no fuera verdad, o no? Y Chela se lanza al gran mundo, al principio es duro, tiene ayuda de su hermano, pero es duro. Sin embargo la suerte le sonríe, y se topa con "aquél" que veía en sus sueños. Y por suerte, no para ella, y de manera nada romántica, se casan. Y lo que viene, ya no es sueño, es vida, no la que prometen los bellos comerciales y telenovelas, que además se salpica de tragedias.