Este libro presenta un estudio empírico acerca de la conceptualización en situaciones que narran interacciones de mandato en niños hablantes de quechua. La investigación echa luz sobre las variaciones de uno de los fenómenos más normativizados en lengua española: la correlación temporal. Los resultados permiten reconocer que la comunicación, entre comunidades que hablan diferentes lenguas, implica situaciones de tensión y asimilación de sistemas conceptuales, más que de unidades aisladas. El libro también considera un problema educativo: qué implicaciones supone la escolaridad masiva. El trabajo concluye que la democratización del acceso al saber implica, ante todo, localizar cuáles son las zonas cognitivas en las que franjas de estudiantes presentan problemas, indagar acerca de las posibles causas, y operar con estrategias específicas de prevención y/o remediación. En síntesis el trabajo realizado cuestiona la posibilidad de generar normas lingüísticas cuando los docentes, transmisores de esas normas, desconocen el sistema cultural, simbólico y conceptual de pertenencia de sus alumnos.