La presente tesis pretende ser una solución al laberinto postmoderno de la antropología, desde un enfoque temático, no monográfico. Desde la modernidad, el yo se enfrenta a la pregunta por la cognoscibilidad de lo que le rodea, y ahora también a la pregunta por su propia cognoscibilidad y existencia. La herencia de esta situación nos ha sido legada con especial claridad por el neokantiano Paul Natorp. Con ayuda de planteamientos filosóficos clásicos y renovadores, como la fenomenología realista, el yo se puede plantear como una realidad cognoscible esencial y existencialmente a partir de la intuición intelectual y de la experiencia de la transvivencia. Autores como Dietrich von Hildebrand y Roman Ingarden aparecen en esta investigación abordando ambas metodologías. Este planteamiento linda con problemas de actualidad como es el caso de la fundamentación de la bioética y deja abierta una tarea cada vez más acuciante: la interpersonalidad del yo y su particularidad femenino/masculina.