En enero de 2015 Esteban Mazzoncini dejó su rutina de Buenos Aires para salir a dar otra vuelta al mundo sin una fecha de regreso. Desde Malasia viajó 25.000 km haciendo dedo hasta Uzbekistán. Durante su primera etapa conoció a los monjes del Tíbet, cruzó el desierto de Mongolia en soledad, durmió con los nómadas en Kirguistán, navegó el río Mekong en Laos, descubrió a los trabajadores de azufre en un volcán de Indonesia, y compartió la realidad de los refugiados birmanos en Tailandia. En su segunda etapa exploró los Balcanes para comprender las secuelas de la guerra de Kosovo, Bosnia-Herzegovina y Croacia y las diferencias culturales entre búlgaros y serbios. Finalmente unió El Salvador con Bolivia y confirmó que la hospitalidad es universal. Durante estos catorce meses fuera de su zona de confort Esteban comprendió que viajamos para conocernos y es ahí cuando todo cobra sentido. El libro es una invitación para que el lector se anime a desafiar sus propias rutas, las de la vida.Este viajero incansable lleva recorrido 87 países, 435.800 km explorados y además es autor del libro Un viajero curioso donde resume 20 años de viaje.