El sabio tiene la capacidad de conocer en dos sentidos: de lo general a lo particular y viceversa. Nosotros optamos por pasar de lo particular a lo general porque no correremos el riesgo de perdernos en una respuesta que olvidó la pregunta: ¿qué son las cosas por ser precisamente cosas?, ¿cuál es la verdadera realidad de lo real?, ¿cuál es el constitutivo característico de lo real?, ¿en qué consiste el mundo? Como es sabido, Platón propone la Teoría de las Ideas. Pero esta Teoría presento problemas insolubles. De ahí se siguió la necesidad de la ontología platónica de los géneros supremos. Pasmos revista al inventario oficial de los géneros, como respuesta a las preguntas anotadas arriba y como orientación a los problemas multiculturales. Además, para entender el mundo contemporáneo, planteamos la necesidad de proponer nuevas ideas metafísicas que nos permitan solucionar las dificultades multiculturales. Nuestro aporte: sumar a la lista de los Géneros Supremos cinco nuevas instancias que cumplen con las condiciones para ingresar a dicho grupo. Terminaremos indicando algunas de las consecuencias éticas que demanda dicha ontología.