La vivienda popular en Bogotá presenta un déficit de oferta que viene anclado en un modelo de construcción de viviendas para los estratos altos. Si bien, el Distrito Capital, ofrece soluciones a través de entidades como metrovivienda. La oferta es incipiente frente a una demanda insatisfecha y ampliada por el déficit de vivienda acumulado en las últimas tres décadas. Como resultado, el mercado se ve abocado a un incremento sostenido de precios y las viviendas para los más pobres son cada día más costosas. Al interior, se muestran los determinantes del déficit de vivienda de interés prioritaria, a la vez que se ofrecen tres alternativas para reducirlo. Se recomienda especialmente, la creación de una Caja para el Fomento de la Vivienda Popular en Colombia y la puesta en marcha del Modelo Brasileño para la construcción de miles de viviendas para las clases populares en las grandes urbes del país. De esta forma se generará crecimiento económico sostenido y mejores niveles de vida para las masas populares en el largo plazo.