Los raudos avances de la ciencia y la tecnología, empujan a revalorar el fin de la educación ambiental desde un nuevo humanismo en el cual, las formas didácticas aplicadas juegan un papel primordial, especialmente en la relación ciencia-humanidad-naturaleza, donde la transdisciplinariedad como línea de pensamiento, presenta alcances didácticos que retan a docentes y estudiantes a intencionar discursos, trabajar cooperativamente, traducir diferentes códigos y lenguajes conceptos e interpretaciones, y a reflexionar sobre sus procesos formativos para tomar responsabilidad en la gestión del conocimiento que lleve a la formulación de escenarios de desarrollo sustentable.