Estamos viviendo un época donde la transformación digital está a la orden del dia. Sin embargo, hay ciertas instituciones que se niegan a dar el siguiente paso y siguen utilizando procedimientos antiguos. Un claro ejemplo de una institución que sigue realizando sus procesos de forma arcaica es la administración pública y más concretamente en el ámbito de las votaciones. Actualmente, cuando se va a votar, en la mesa donde se deposita el voto hay tres personas: el presidente de la mesa y dos vocales. La función principal de estas personas es presidir el acto de votación, controlar el desarrollo y realizar el recuento y escrutinio. El presente trabajo pretende aportar una solución tecnológica viable al proceso de autentificación de las personas durante el ejercicio de unas elecciones, integrando un proceso de transformación digital que permite una reducción de colas y disminuye el error producido por el factor humano.