El libro pretende plantear una mirada de fundamentación desde la cual es posible identificar la importancia de las prácticas ancestrales en el proceso formativo y educativo, de igual forma, la propuesta a grandes pinceladas propugna por la educación con fines liberadores y conforme a ello, presenta el pensamiento de Franz Fanon, por cuanto, la memoria herida de las comunidades educativas ya sea por discriminación, abandono social, pobreza, entre otros, requieren hacer su proceso de transición del dolor para sentirse liberados. Por ello, Paulo Freire, como el creador de la educación liberadora, irradia desde el contexto de los desposeídos, la importancia de una educación en la vida y para la vida. Manuel Zapata Olivella, es el maestro de la trama étnica, conocedor de la filosofía africana y por ende, exponente del Muntu americano como un estado de libertad; pensamiento de utilidad en la vida educativa para comprender que las comunidades aprehenden de la naturaleza y su mente-cuerpo es dinamizado por el movimiento, la danza y el color. Fals Borda con la investigación acción participante, llama la atención a visibilizar la educación como una gran misión organizativa.