Se puede decir que la construcción de la efectividad ha sido posible a través de las narraciones de la Alta Gerencia, los ex Secretarios de Salud, cada uno de ellos, al utilizar como vehículo catártico su biografía profesional, de forma muy emotiva y voluntaria, para nutrir y enriquecer la relación entre las estrategias y estructuras organizacionales como secuencias lógicas, congruentes y con lenguaje predominante cualitativo. La percepción de efectividad se fundamentó en los logros bajo condiciones reales y los logros se basaron en las metas asignadas por el Gobierno Federal (debido al centralismo oficial en la toma de decisiones) derivadas de la definición de prioridades nacionales y en consecuencia el diseño y la asignación de estrategias para definir él ¿cómo? y los recursos para resolver el ¿con qué?, para todos y cada uno de los Estados del País, incluso después de la descentralización de los Servicios Estatales de Salud en los 90s y hasta nuestros días, como parte de la integración como Sistema Nacional de Salud. Una gran influencia sobre el conocimiento de los Secretarios de Salud para determinar el nivel de efectividad de la organización, se expreso de forma consistente.