Las investigaciones policiales encubiertas se hacen merecedoras de un detenido estudio, no sólo por su continua expansión, sino también por la afectación de derechos fundamentales que comportan. Especialmente, con motivo de la prevista introducción en la normativa procesal penal de la figura del agente encubierto informático para la investigación de delitos cometidos a través de internet. La infiltración policial se configura como medio de prevención e investigación criminal más allá del ámbito delincuencial del narcotráfico o el terrorismo, revelándose como mecanismo idóneo para la detección y represión de la delincuencia en la red.