En el mundo actual los problemas de la conservación de la naturaleza a menudo se relegan a segundos y terceros planos. No obstante, estos problemas pueden limitar el desarrollo futuro de la sociedad humana, puesto que trae consigo la imposibilidad de abastecer a la humanidad con productos alimenticios a la vez que produce un daño irreparable para los componentes más importantes de nuestro medio ambiente natural. La conservación del medio ambiente es uno de los problemas más graves que enfrenta la humanidad en la actualidad a nivel mundial. La contaminación ambiental, la desertificación, la pérdida de biodiversidad y los cambios climáticos permanecen como evidencias de que el hombre no ha sido conocedor de su propia naturaleza y se requiere de cambios a corto, mediano y largo plazo (Altieri, 2009). Entre los retos más importantes se encuentra disminuir a niveles permisibles la degradación y contaminación de los suelos, así como recuperar la fertilidad de los ya degradados.