Las empresas en la actualidad, enfrentan escenarios restrictivos y dominantes resultado de mercados altamente competitivos. El enfoque sistémico se convierte así, en una alternativa de gran impacto, que contribuye de manera significativa a la mejora organizacional. La sinergia que produce la interacción del factor humano y los métodos de trabajo, genera ambientes altamente productivos, que privilegian el desarrollo de todos los actores. La percepción del todo y el análisis de las partes como organismo dinámico, permiten crear puentes de comunicación en toda la estructura, se fortalece el trabajo colaborativo y se crea la armonía necesaria para el logro de los objetivos institucionales.