El enriquecimiento ilícito como una enfermedad que socávala legitimidad de las instituciones públicas, atenta contra la sociedad, el orden moral y la justicia, así como al desarrollo integral de los pueblos. Al combatir el enriquecimiento se fortalece las instituciones democráticas, se evitan distorsiones en la económica, vicios en la gestión pública y el deterioro de la sociedad, sin embargo, esta regulación significa un paso importante en la lucha de dicha enfermedad y para esto, hay que generar conciencia entre la población sobre la gravedad de este problema. El presente estudio, a diferencia de otros realizados anteriormente, sin menospreciar los resultados obtenidos en aquellos, se diferencia, en el punto de vista, de que trataremos a la impunidad del Enriquecimiento Ilícito, tomando como punto de partida, a los Valores de la Administración Pública afectando el derecho a la propiedad de los ciudadanos e incluso de personas jurídicas.