El libro es la conclusión de cinco años de investigación sobre la relación entre las narrativas y la patología clínica, integrando dentro de las narrativas no sólo los mitos personales o las historias relatadas, sino todo aquello que tenga que ver con las metáforas como la literatura o el cine. "Muchas y muy fructíferas han sido, a lo largo de la historia de la cultura, las relaciones entre la psicología y la literatura. Pero el fenómeno literario va más allá: la psicología se enraíza en la literatura en tanto que metáfora; nada nos muestra mejor el alma humana, la psique, que la literatura. Se parte de la idea de que psicología y literatura se acercan a la comprensión del alma humana a través de la creación de un espacio de encuentro cuyo modelo está representado en la relación de hospitalidad que se crea entre anfitrión e invitado. A través de la fenomenología hermenéutica, se hace una lectura arqueológica sobre ambas disciplinas que aúna el clasicismo griego con la modernidad freudiana. Freud ya intuyó no sólo la estrecha relación entre ambas disciplinas sino que, además, inconscientemente desveló cómo se puede entender la psicología a partir de la literatura.