El Hotel Miramar se caracteriza, entre otras cosas, por su arquitectura ecléctica, presentando diversas expresiones del historicismo de fin de siglo unido a la vanguardia arquitectónica de la época, y destacando por ser la última obra del arquitecto Alejandro Chataing y sus colaboradores. En ella se aprecia la concreción material de la experiencia y madurez creativa de su autor, resultando una edificación rica en elementos a ser investigados. A nivel histórico, el Miramar constituyó el primer hotel de turismo de la Venezuela del siglo XX y dio inicio a la Red de Hoteles Nacionales de Venezuela ; en lo urbano su implantación en la Estancia Eraso valorizó el trazado urbano local reforzando, en lo social, el posicionamiento de las clases privilegiadas en la escogencia de Macuto como sitio preferido para temperar. No se puede acometer el estudio del Miramar sin articularlo a la figura y trayectoria de su proyectista, Alejandro Chataing, uno de los más importantes protagonistas en el proceso histórico de la arquitectura venezolana. Por lo expuesto, el Hotel Miramar es pieza clave en la comprensión del desarrollo de la arquitectura venezolana a comienzos del siglo XX.