Los sones del mariachi rural coculense forman parte de nuestro patrimonio cultural que nos distingue como mexicanos a nivel internacional. Por ello, en el libro realizamos un acercamiento al elemento artístico como fundamento de la magnitud del impacto ecosociocultural del mariachi de Cocula Jalisco. Nuestras indagaciones nos permiten ubicar la forma en que dicho impacto se expande, al consolidarse el mariachi de cuerdas, en 1870. Posteriormente se innova el mariachi al incorporar otros instrumentos e incursionar en varios géneros musicales, mostrando así su versatilidad. Tal evolución del mariachi implica el dinamismo de éste como tradición inventada y reinventada turísticamente al ser conjugada con charrería y tequila. Finalmente podemos decir que el mariachi urbano entró de lleno al mundo del espectáculo con el Encuentro Internacional del Mariachi (que inició en 1994 en la ciudad de Guadalajara), y su imagen es manipulada con fines turísticos. De ahí que se promueva turísticamente a un Jalisco representativo de la mexicanidad, aunque la diversidad cultural jalisciense sea más que charros, mariachis urbanos y tequila.