Se busca un libro, se busca desesperadamente, el libro en cuestión esta guardado en una caja de sueños que, como la caja de pandora, no solo guarda papeles y letras con más o menos sentido, algo de desesperación, mucho de decepción y mucho de resignación. Se busca por los cuatro puntos cardinales, no se sabe quién con exactitud lo busca, los rumores dicen que lo buscan los guardianes del karma, o que quizás lo buscan los vendedores de fabulas o los contadores de cuentos.