El masaje es una de las modalidades más antiguas de la medicina como medio para recuperar la salud y eliminar el stress que nos ocasionan los problemas de la vida cotidiana. La salud o bienestar significa mantener el equilibrio de nuestra energía vital, cultivar las fuerzas autocurativas y confiar en ellas. Estamos acostumbrados a poner atención a todos los estímulos externos, ¿pero cuánto tiempo nos tomamos para reflexionar sobre nosotros, nuestro cuerpo, nuestros sentimientos, nuestras necesidades y nuestros deseos? A partir de los últimos quince años se ha acumulado una gran cantidad de evidencia que demuestra que el masaje posee una impresionante lista de beneficios tanto para la salud de nuestro cuerpo como de nuestra mente. El masaje mejora la circulación de la sangre y el flujo de la linfa. Esto ayuda a llevar nutrientes a las células y a eliminar impurezas y sustancias tóxicas. El masaje también aumenta la capacidad de la sangre para transportar oxígeno. Ayuda a liberar sustancias llamadas endorfinas que nos dan una sensación de bienestar y ayudan a combatir el dolor. Ayuda a que los músculos mantengan su flexibilidad. Ayuda a reducir el estrés.