Amun, el inmortal guardián del demonio de los Secretos, podía manipular los pensamientos más oscuros de quienes lo rodeaban. Por eso tuvo que ser encadenado y aislado para seguridad de aquéllos a quienes quería. Entonces, su única esperanza de liberación pasó a ser la muerte. Hasta que conoció a Haidee, una prisionera como él, cuya belleza y vulnerabilidad oculta lo obligaron a pasar una prueba de lealtad hacia sus amigos. Haidee era una asesina de demonios que había sido educada para despreciar a la raza de Amun. Sin embargo, ¿cómo iba a odiar al hombre que la hacía arder con sus caricias? Para salvarlo, debía entregarse en cuerpo y alma. y enfrentarse a la ira de un poderoso adversario que había jurado destruirla destruirla.
Por un puñado de oro Mary Balogh Julian Dare no sólo era guapísimo y rico: también era el heredero de un condado. Así pues ¿qué necesitaba un hombre que lo tenía todo? La inocente y hogareña Verity Ewing se había propuesto ofrecerle su corazón, el regalo más preciado de todos. Temporada de pretendientes Nicola Cornick Después de varios encuentros comprometidos con diversos crápulas, la heredera Clara Davencourt concluyó que le hacía falta el consejo de un experto. ¿Y quién mejor para esa tarea que Sebastian Fleet, el libertino más conocido de todo Londres? Su tutelaje, sin embargo, no iba a transcurrir conforme a lo previsto, porque ¿cómo iban a conservar la objetividad tratándose de lecciones del corazón? Un regalo envenenado Courtney Milan Lavinia Spencer había estado ahorrando afanosamente para agasajar a su familia con una verdadera cena de Navidad. Días antes de las fiestas, su hermano fue víctima de una estafa que los dejó endeudados y al borde de la ruina. Hasta que un misterioso benefactor se ofreció a saldar la deuda. La inocente Lavinia se quedó atónita al saber lo que deseaba a cambio el apuesto William White. ¿Estaba dispuesta a aceptar aquel regalo envenenado por el bien de su familia?
Por un puñado de oro Mary Balogh Julian Dare no sólo era guapísimo y rico: también era el heredero de un condado. Así pues ¿qué necesitaba un hombre que lo tenía todo? La inocente y hogareña Verity Ewing se había propuesto ofrecerle su corazón, el regalo más preciado de todos. Temporada de pretendientes Nicola Cornick Después de varios encuentros comprometidos con diversos crápulas, la heredera Clara Davencourt concluyó que le hacía falta el consejo de un experto. ¿Y quién mejor para esa tarea que Sebastian Fleet, el libertino más conocido de todo Londres? Su tutelaje, sin embargo, no iba a transcurrir conforme a lo previsto, porque ¿cómo iban a conservar la objetividad tratándose de lecciones del corazón? Un regalo envenenado Courtney Milan Lavinia Spencer había estado ahorrando afanosamente para agasajar a su familia con una verdadera cena de Navidad. Días antes de las fiestas, su hermano fue víctima de una estafa que los dejó endeudados y al borde de la ruina. Hasta que un misterioso benefactor se ofreció a saldar la deuda. La inocente Lavinia se quedó atónita al saber lo que deseaba a cambio el apuesto William White. ¿Estaba dispuesta a aceptar aquel regalo envenenado por el bien de su familia?