En el trópico Mexicano la producción de carne y leche proviene de las fincas denominadas como de doble propósito caracterizadas por producir con bajos insumos, escasos niveles de inversión económica y mano de obra poco calificada. En estas fincas tropicales, la productividad depende de la disponibilidad de forrajes en el año, por lo que se considera que la producción de leche y carne es estacional. Asimismo, son muy pocos los productores que utilizan complementos alimenticios durante las épocas de estiaje, ya que los alimentos concentrados son caros y la respuesta en la producción de leche y carne es mínima por el bajo potencial productivo del ganado. Por esto, es importante que los productores establezcan en sus fincas, estratégias de alimentación a bajo costo, ya sea con el uso de henificados con el forraje excedente en las épocas de abundancia, uso de ensilados proveniente de forrajes de corte o bien con bloques nutricionales suministrados directamente en la pradera. Los bloques nutricionales generan resultados positivos a muy corto y mediano plazo y es una tecnología fácil de aplicar, reproducible y adaptable a las características de las fincas de bajos recursos económico