Este ensayo académico enfoca una búsqueda esencialmente humana, aduce la enseñanza Zen,"En búsqueda del Buey" que representa gráficamente ese camino espiritual donde el hombre deberá vivir un momento trascendental. Cuando adquiere conciencia de sus posibilidades, potencialidades, como de sus debilidades. Las autoras compartimos en él, muchas de nuestras reflexiones que siendo eminentemente académicas, son esencialmente humanas. Refleja esa labor interna que los profesionales que nos dedicamos a la osadía de educar a otros, la lleva a cuestas, con el peso de autodirigir nuestras propias vidas para hacerlo en otredad sin desasosiegos, sin apuros, sin presión. A pesar de la actual dinámica social, confiamos que estas vías propuestas para llegar a ese autodescubrimiento son motivadoras a un autoanálisis de todos los seres humanos que corren el riesgo de confrontarse. Las vías van por Ortega y Gasset, Savater, Jung, Heidegger, Gadamer, Luckman, Habermas, Bauman, Binswanger y Foucault.Al cierre, se genera una exégesis hacia la práctica de la Orientación fundamentada en la construcción de una comunidad intersubjetiva y del perfil de un Orientador feliz.