Actualmente la Gestión de Calidad ocupa un papel preponderante en cualquier actividad; los requerimientos de este sistema han comenzado a presionar sobre diversos aspectos de los procesos que requieren certificaciones especiales, como ser la calibración de instrumentos, los cuales deben ser satisfechos como parte del procedimiento. Surge entonces la necesidad de implementación de la certificación en calidad en otras áreas, especialmente los laboratorios, pero atendiendo además en este caso a la excelencia en la Producción de Resultados, y no sólo a la Gestión y Procedimientos. Se introduce el concepto de Acreditación, una forma más amplia de concebir la Calidad, que incluye la calificación de las actuaciones experimentales, cuyos resultados serán utilizados en otros procesos certificados.