Los jóvenes en la vida estudiantil enfrentan un sin número de problemas de toda índole y el aspecto psicológico no se queda fuera de estos cambios, en los que sin duda, uno de los aspectos que más daños ocasiona es el estrés académico, que amenaza la integridad vital del individuo como resultado de diferentes estresores académicos como, la sobrecarga de tareas, la falta de tiempo para la realización de tareas o actividades dentro del salón de clases, los exámenes y evaluaciones de los profesores, provocando sentimientos de tensión, ansiedad, depresión, mal genio, baja autoestima, frustración, nerviosismo y negatividad.