La epilepsia es una enfermedad neurológica, en donde aproximadamente el 70% de los pacientes responden a los tratamientos convencionales, pero en cambio, el 30% no lo hacen. El aceite de cannabidiol, el cual se extrae de la especie Cannabis sativa mediante fluidos supercríticos (CO2), es una nueva alternativa terapéutica para el tratamiento de esta enfermedad. Por tal motivo, es necesario garantizar la calidad del producto para los pacientes que lo consumen. En esta investigación se caracterizó el aceite de cannabidiol, realizando el control de calidad del producto, mediante ensayos organolépticos, físicos, químicos y microbiológicos. Además se verificó la presencia de los principales metabolitos secundarios al compararlos con los respectivos estándares.