La biodiversidad de La papa (Solanum tuberosum L.) se convierte en un regalo de increíble valor para la agroindustria y la gastronomía nacional y mundial, tiene tanta presencia en las mesas de los cinco continentes, lo prefieren desde los círculos más exquisitos de la gastronomía, hasta los platos más humildes de quienes la consumen para combatir su hambre y sobrevivir en la pobreza ahora globalizada. En la sierra latinoamericana, existe mucha expectativa del cultivo de papa con pulpa pigmentada por sus carotenoides y polifenoles que son antioxidantes naturales, tienen beneficios potenciales para la salud, tienen propiedades antibacterianas, antivirales, antiinflamatorias y anticancerígenas (Ladrum y col., 2001 y Pascual-Teresa y Sánchez-Ballesta, 2008), que por su alto contenido de nutrientes, pigmentos y compuestos anticancerígenos y antioxidantes, determinan la alimentación funcional para la salud.