El protocolo de evaluación y valoración psicológica brinda al equipo interdisciplinario de COIBA, directrices e instrumentos que permiten reconocer y evaluar el grado de perdurabilidad y estabilidad de la sintomatología de un trastorno psicológico en los reclusos (as), y orientar formulación clínica de estos y sus problemas en términos cognitivos y conductuales; teniendo como finalidad facilitar el diagnóstico clínico, rehabilitación, prevención en el deterioro psicológico y la reincidencia en el delito.