En los últimos años, la discusión a escala internacional sobre la habitabilidad gira en torno a las dimensiones arquitectónicas y sociales que la integran; su análisis incluye las características físicas de la vivienda y su entorno, y las psicosociales de las personas que conviven en un determinado lugar. De ahí la necesidad de focalizar en la familia y en el conjunto de relaciones sociales que se producen en el espacio habitacional. Por eso, el propósito de este libro es colocar los estudios sobre la habitabilidad en la vivienda en el ámbito de las disciplinas que estudian las relaciones sociales, para contribuir al alcance de la noción de habitabilidad y perfeccionar la política habitacional cubana. Para ello, se discute un marco teórico-conceptual; luego, se develan las transformaciones socioeconómicas fundamentales acaecidas en los últimos años en Cuba y cómo estas han impactado los factores objetivos y subjetivos de la vida familiar; se discuten también los resultados de un estudio de casos para tributar a la crítica el concepto de la habitabilidad desde la perspectiva familiar.