En las últimas décadas la historiografía mexicana y latinoamericana de la segunda mitad del siglo XVIII se ha mostrado interesada en analizar los grupos pudientes en sus zonas de acción o de influencia. Por ello se enfocaron en la importancia adquirida por los comerciantes y sus corporaciones en la vida económica y política del virreinato. Estos estudios han destacado la existencia interna de redes sociales y vínculos de negocios con el fin de mantener unidos y estables los intereses económicos y políticos de individuos, familias y corporaciones en el largo plazo. Nosotros nos enfocamos en el estudio familiar y de redes; tres de ellas, que motivadas por el afán de ascender y reafirmar su posición hegemónica en una región periférica, se organizaron entre ellas y otras familias de igual posición económica y social con la finalidad de crear redes comerciales y matrimoniales para consolidarse como los hacendados algodoneros de la Provincia de Zacatula (la actual Costa Grande del Estado de Guerrero, México)y finalmente obtener los principales cargos políticos y militares de sus lugares inmediatos, del poder legislativo y así formar parte de la clase política mexicana del siglo XIX.