La filosofía política es esencial a toda forma de pensamiento y acción en la vida de los ciudadanos y las instituciones que componen la sociedad actual. La filosofía política puede dar un sentido profundo a lo que quiere y busca la sociedad. Por ello, la filosofía política debe plantearse como una ciencia aplicada a la realidad política y social, para darle una orientación ética y humanista. De esta forma, la filosofía deja de ser un pensamiento abstracto y puede ser motor de ciudadanía y acción colectiva institucional, y crear verdaderas competencias ciudadanas. Así, la asignatura de filosofía política debe partir de la realidad y estar siempre comprometida con la acción.