Los bancos marroquíes han optado por la desmaterialización de los servicios bancarios durante el último decenio, una estrategia de inversión masiva en tecnología digital para mejorar la experiencia del cliente y captar una gran parte del mercado marroquí. Sobre todo, la mayoría de los bancos marroquíes tienen un alto nivel de excelencia en términos de tecnología, con instalaciones de alta tecnología, servicio al cliente y atención al cliente, donde todas las transacciones y operaciones están computarizadas.