El gobierno de México gasta grandes cantidades de recursos económicos anualmente para el fortalecimiento de las bibliotecas adscritas a las Universidades Públicas distribuidas en todo el país. La intención de dotar de mayor capacidad instalada para la atención de los usuarios, acervos, equipamiento de cómputo, suscripción a bases de datos, etc. consume una proporción sustancial del dinero que la administración pública federal proporciona vía subsidio ordinario y extraordinario. La asignación de los recursos públicos para las bibliotecas universitarias, dadas las características de estas, debería formar parte de un gran proyecto nacional de adquisición de recursos de información en apoyo a la formación profesional en las unviversidades del sistema educativo mexicano. Este trabajo examina la política y práctica de financiamiento gubernamental a las bibliotecas universitarias en México