Este libro responde a la pregunta: ¿es viable que una comunidad de habla vuelva a separar fonológicamente dos unidades que se habían fusionado previamente por completo? A lo largo de la investigación, surgen nuevas hipótesis, tales como la posibilidad de una variedad lingüística conformada por una única variable fonológica que actúe como núcleo, la existencia de una variación paramétrica individual en el proceso de escisión o la constatación de una disociación acústico-perceptiva, entre otras. Como principal aportación original, se propone un nuevo modelo de cálculo de distancia acústica basado en 8 parámetros acústicos mediante la técnica de las coordenadas polares, que permite cuantificar la distancia fonética que un informante realiza de manera media en función de dos series léxicas distintas.