Los conocimientos y experiencia que los miembros de los equipos adquieren durante los proyectos software constituyen un valioso activo para las organizaciones que buscan mejorar sus prácticas y procesos de desarrollo software. Los enfoques existentes para capturar y gestionar esos conocimientos y experiencia se basan esencialmente en la creación y mantenimiento de repositorios de experiencias pero no prescriben la manera ni el momento en que los diferentes procesos de gestión del conocimiento deben llevarse a cabo. En este trabajo se presenta un modelo para la gestión del conocimiento y la experiencia cuyas fases y tareas se integran a las actividades de los proyectos así como a las iniciativas de mejora de las prácticas y procesos software. Se presenta también un estudio empírico de la implementación práctica del modelo. Este estudio permitió determinar que el modelo es viable de ser implementado, que su integración a las actividades de proyecto no constituye una sobrecarga de trabajo, y que con su aplicación es posible identificar lecciones aprendidas y buenas prácticas que contribuyan a la mejora de los procesos de desarrollo software en uso en una organización.